FACTORES ABIÓTICOS
TEMPERATURA MEDIA:
Durante el invierno se producen persistentes nieblas y heladas, aunque en ningún momento las temperaturas mínimas absolutas en los meses más fríos, superan los -15º C (temperatura límite invernal para el cultivo de la vid)
La temperatura media en primavera es irregular, alterna las temperaturas suaves con las heladas primaverales, no suponiendo en ningún caso un factor limitante para el cultivo de la vid.
En verano la temperatura también es irregular, alternándose periodos tórridos y áridos con otros fríos. La temperatura media de los meses más cálidos se encuentra por encima de los 20º C
En otoño la temperatura es suave y generalmente lluvioso que favorece un buen final de maduración.
En la zona se producen temperaturas extremas entre el día y la noche. Factor condicionante y favorable para la acumulación de los polifenoles de la uva y la potenciación de los aromas.
LA PLUOVLOSIDAD
Las precipitaciones medias anuales en torno a los 500 milímetros, repartidas durante los periodos estival y otoñal.
Aunque no llueve mucho por esta zona, hay mucha agua debido a la niebla.
NIEBLA
La niebla es un factor muy imponte para la vid. Ya que el agua de la lluvia no es la que riega los viños si no la niebla.
La niebla en esta zonas es muy habitual, sobre todo a primera hora de la mañana.
RADIACCIÓN SOLAR
Alta luminosidad en la zona, con una media de 2.700 horas de sol anuales, lo que favorece una maduración uniforme de la baya